Una fecha que obliga a frenarse y pensar…
A quien más a quien menos, a todos el cumpleaños nos pone ‘un poco tontos’.“De alguna forma nuestro cumpleaños nos pone en contacto con nosotros mismos”.
Y claro eso ‘frena’, nos hace aterrizar; si vivimos en una mezcla de sentimientos muy intensos que se manifiestan de forma desenfrenada de acontecimientos, nos exige cierta introspección, cierto sondeo interno.
“Muchas personas volcadas en el exterior, haciendo actividades, ocupándose de llenar el tiempo con sus relaciones, el trabajo, etc.. Nuestros cumpleaños nos hace pensar en nosotros. Y si, no creemos cumpliendo nuestros deseos, nos hace sentir cierta melancolía”.
Algunas cosas para superar esta depresión…
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“Si no te gustan los cumpleaños, lo primero es preguntarte si quieres disfrutar el día o amargártelo. Tú tienes la elección y, en función de lo que elijas, pasarás un día agradable o no”.
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“Aprovecha ese día para darte un homenaje, permítete hacer algo que habitualmente no puedes y disfrútalo al máximo”.
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Si decides amargarte el día, es importante que caigas en la cuenta de que es tu elección. Tú lo has elegido, así que nada de victimismo con los demás: no te regodees en el elemento”.
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“Si quieres recibir, empieza dando; anima a tu familia y conocidos a que se unan a ti para hacer algo especial, aunque sólo sea estar juntos a pasar un rato apreciados por los demás, nos ‘quitamos’ años”.
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“Si te consideras poco ocurrente o mal organizador, pídele a alguien creativo que te ayude y te dé ideas para montar algo diferente; te aportará sugerencias”.
Hago este articulo porque soy de las que se deprime cada vez que cumplo años, trato de que no sea así pero me gana el gorrión…. Espero que les sea útil.