Cambia tu mente

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Modifica tu actitud hacia la vida y consigue lo que te propongas.

Vive en el presente. Aferrarte al pasado solo te generará resentimientos y arrepentimientos. “Así como nunca te plantearías conducir un coche mirando solo por el retrovisor, has de darte cuenta de que obsesionarte con el pasado no es bueno”.

Piensa en tu tripa. Tu instinto y tu celebro están muy relacionados en lo que a emociones se refiere; de hecho, en él se encuentra el 95% de la hormona de la felicidad, la serotonina. “La generan las células nerviosas del intestino; evita la depresión, regula el sueño, el apetito y la temperatura corporal ”. Esta es una de las razones por las que es esencial intentar mantener la salud del aparato digestivo.

Ojo a tus expectativas. Ser realista es fundamental para ser feliz. “Si te sientes frustrada y crees que nunca se cumplen tus expectativas en el trabajo, tu pareja o en la vida, en general, quizás sea el momento de replantearte tus necesidades y analizar tu modo de enfocar la vida”. La frustración es una alarma que te advierte de que has de cambiar el modo en que haces las cosas(cómo actuar, lo que esperas o crees…) “Lo mejor es bajar tus expectativas, a la vez que elevas la calidad de tus actos. Esto reducirá el efecto de las influencias externas, incrementará tu autoestima y tu determinación”.

Desconéctate de la tecnología. Vivimos rodeados de conexiones. Mandamos mensajes de textos, correos electrónicos constantemente, lo cual hace que nos desconcertemos e incluso que se eleven los niveles de estrés. Ha llegado el momento de desintoxicarse de tanta tecnología y conectar de nuevo con el mundo real. “Por la noche en tus ratos de ocio, apaga los dispositivos electrónicos que haya en tu habitación. Descubrirás cuanto tiempo tienes a tu disposición”.

Sé agradecida. Dale rienda suelta a tu optimismo, centrándote en aquello que haces, y olvidándote de lo que no lograste. “Pregúntate: qué es lo que me va bien???Si tu negatividad te hace responder ‘Nada, todo me va mal’, esfuérzate y piensa en cosas buenas: tu salud, tu movilidad, tus amigos…”

Transforma tu pensamiento. Todos pasamos por épocas en las que necesitamos apoyo; en ese momento, imágenes o mensajes positivos pueden ayudar. “Alimenta el celebro en pensamientos que te sean útiles, y destierra aquello que no te vaya bien”.

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