El hecho de rasurarnos las axilas a menudo produce irritaciones en esta delicada zona del cuerpo, algo que también ocurre cuando eliminamos el vello con ceras y maquinillas, lo que provoca que nuestras axilas pierdan su belleza. No obstante, recuperarla es muy sencillo si hacemos uso de los remedios caseros.
Ingredientes
Unas gotitas de zumo de limón (con exprimir medio limón será suficiente)
2 cucharadas de bicarbonato sódico
Pasos a seguir
1- Mezcla el limón con el bicarbonato hasta obtener una pasta homogénea.
2- Extiende el compuesto por las axilas realizando un suave masaje circular.
3- Después, deja que el bicarbonato y el limón actúen durante 10 minutos.
4- De este modo, conseguirás aclarar tus axilas y eliminar esas desagradables manchas grisáceas que aparecen en esta zona fruto de las continuas depilaciones y rasuraciones.
5- Repite esta misma operación todos los días hasta que tus axilas se vean bellas, claras y libres de manchas.