Vive tu vida cumpliendo tus propias expectativas (y no las de los demás)

Vive tu vida cumpliendo tus propias expectativas (y no las de los demás) Es una circunstancia bastante común y que afecta a muchísimas personas en algún momento de su vida: darse cuenta de que sienten y viven de acuerdo a lo que los demás esperan de ellos, haciendo cosas que están incluso en contradicción con lo que realmente desean.

En realidad, si bien el “darse cuenta” es un instante, la situación de estar “preso” en las expectativas ajenas se construye de a poco, a lo largo de toda la vida. Losdeseos de los otros, incluso de los seres queridos, constituyen una especie de telaraña enorme en la cual queda atrapada la persona, construyendo una forma de actuar que obedece más a lo que viene de afuera que a los sentimientos de la propia persona.

Romper con esa dinámica

Cuando la persona llega a ese punto en que se da cuenta que siente dolores y alegrías ajenos, lucha por sueños de otros y hasta vive la vida que los demás quieren, puede experimentar fuertes sentimientos: angustia, depresión, desesperanza, abatimiento, impotencia, rencor, por sentirse en un lugar que no desea y sentirse prácticamente atado de pies y manos.

No se puede vivir cumpliendo por completo (y únicamente) los deseos y expectativas de los demás. Es lógico que los tengamos en cuenta, porque necesitamos relacionarnosy existe un continuo “ida y vuelta”, un “toma y daca” entre satisfacer al otro y satisfacer al propio yo, pero debe haber un balance entre ambos aspectos.

La felicidad, que debe venir de la mano con la autoafirmación, se construye en ese juego sin fin y por eso es necesario, en algún momento, frenar, analizar qué es lo que hacemos en los distintos campos de nuestra vida (laboral, familiar, sexual, formativo) y hacerlo pasar por el tamiz de quiénes somos y qué queremos realmente. Sin embargo, puede ser más complicado de lo que parece.

Una lucha difícil, pero no imposible.

 

Sería fantástico que todo consistiera en, simplemente, darse cuenta del hecho, tomar la decisión y simplemente cambiar, pero normalmente es algo bastante más complejo, ya que la persona está condicionada por la familia y por la sociedad a cumplir con el papel que ya tiene asignado. No es simplemente descubrir lo que le hace feliz e ir tras eso: significa romper, de formas más o menos difícil, con un sinfín de preconceptos que vienen desde la más tierna infancia y muchas veces desde antes de nacer, cuando la familia le pone un nombre al nuevo niño y hasta diseñan su futuro.

Para la mayoría de las personas, el difícil momento de dirigir la vida de acuerdo a lo que realmente siente es redescubrirse y replantearse totalmente la vida y lleva a conflictos más o menos grandes con su entorno más cercano.

Si tú estás en ese momento, es necesario tomar muchas decisiones, para lo que debes tener en cuenta muchos aspectos. Algunos de ellos son:

– Lo primero es asumir que no puedes cumplir totalmente con las expectativas, exigencias o deseos de todos los demás. Simplemente, no es posible ni sano y si se hace, puede traer graves consecuencias emocionales e inclusive físicas y si te relegas hoy, seguramente te pasará factura mañana.

– Para llegar a conocer lo que realmente deseas, es necesario pasar tiempo a solas, contigo misma. A veces sentirás como que te aturdes con actividades para cumplir con todos los demás, vas de un lado a otro sin parar, pero te dejas de lado a ti misma.

Dedicar un tiempo a hacer una actividad que te sea placentera y unos momentos a solas, son fundamentales para conocerte y por supuesto, saber qué realmente se desea hacer.

 

– Aprende a decir “no”, sin remordimientos y sin culpa, cuando no puedes hacer algo o cuando te hará mal.

– En este largo camino de autoconocimiento y autoafirmación, es bueno reconocer que no hay recetas ni caminos seguros. Seguramente habrá muchas equivocaciones, pero únicamente se hace camino al andar. No es bueno dejar de hacer algo por miedo al error, ya que seguramente más tarde vendrá el arrepentimiento por no haberlo intentado. Y una cosa extremadamente importante: nadie es perfecto, así que con toda seguridad nadie tendrá la fórmula adecuada para ti.

 

– La aceptación, la gratitud y las “buenas ondas” de parte de los demás son algo que hace sentir bien, pero no son imprescindibles o al menos, no debe preocuparte que vengan de todos. Selecciona las personas realmente importantes para ti, analiza sus consejos y sus ejemplos, pásalos por el tamiz de tu propio yo y saca tus propias conclusiones.

 

Si llegaste a la conclusión que no estás cumpliendo realmente con tu más íntimo sentir, es necesario que tomes decisiones: la vida es una sola y te pertenece solo a ti, no a los demás.

OTROS TEMAS DE INTERES..

Helado de limón

Tratamiento de piña.. para todo tipo de cutis!!

DETEN LA CAÍDA DEL CABELLO….

Tus relaciones mejorarán si…

Busca el lado positivo de LA SOLEDAD

Organizar nuestro clóset .. Hace más agradable nuestra vida..!!

LOGRA TODO LO QUE TE PROPONGAS.. ¡EN DOS MINUTOS!

Pañuelos impecables !!!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*